'>
No sabia contra que luchaba, no sabia si iba a ser algo doloroso, si no iba a sentir nada, no sabia que iba a ser todo eso, no lo entendía. Pero tenia el presentimiento de que todo aquello ella ya lo sabía desde un principio, solo estaba esperando que se lo confirmen.
Y en ese miedo de perderlo todo, me di cuenta que tenia que hacerlo. No espere ningún otro segundo. Me moví deprisa entre el bosque, sin miedo a nada, sabiendo que nada peor me iba a pasar.
Las calles de la ciudad estaban desiertas. No había nadie ni nada. Edificios inmensos totalmente vacíos, corazones rotos, almas partidas. Pensamientos confundidos, miedos compartidos. Y ella corría, no sabia su destino, sus pies se movían al compás de su fuerte y decidido corazón. Estaba comenzando a desesperarse.

No hay comentarios: